El concierto iba a celebrarse en una zona del madrileño distrito de Moncloa-Aravaca, por lo menos, así fue aprobado en su Junta Municipal con el consenso de todos los grupos políticos. Sin embargo, poco después, el Ayuntamiento de Madrid, encabezado por Martínez-Almeida, decidió echar para atrás la decisión y cancelar la actuación por supuestas razones presupuestarias.
Este acto movilizó, hace justo un año, a miles de personas, que vieron en la decisión una clara intencionalidad política en la suspensión, alegando motivos exclusivamente ideológicos.
Lo cierto es que las Juntas Municipales, vaciadas de competencias tras la aprobación de la reforma de la Ley de Bases del Régimen Local –impulsada por el propio PP–, aún conservan la capacidad política y económica de organizar festejos en su distrito, por lo que no se comprende el intervencionismo del Ayuntamiento en la decisión de la Junta por motivos presupuestarios.
Los vecinos organizaron tanto una masiva recogida de firmas como un concierto en solidaridad con el artista, Luis Pastor, a modo de protesta por lo que algunos han considerado un acto de “fascismo cultural” llevado a cabo por el alcalde, quien, por cierto, suscita las empatías de, incluso, la oposición, considerándole el “ala progre” de la derecha.
Hace un año que ese "maravilloso" alcalde de Madrid, Martínez Almeida, "progre de derechas", alabado incluso parte de su oposición, censuró un concierto de Luis Pastor.
¿Lo llamamos fascismo cultural, lo llamamos inquisición, lo llamamos intolerancia, lo llamamos franquismillo? pic.twitter.com/1kjTMaaKMH
— Emilio Silva Barrera (@Emilio_Silva_) August 29, 2020
TE NECESITAMOS PARA SEGUIR CONTANDO LO QUE OTROS NO CUENTAN
Si piensas que hace falta un diario como este, ayúdanos a seguir.
