Mauricio Casals, consejero de Atresmedia y presidente de La Razón, recibió información del excomisario Villarejo justo después de que se grabara, de forma ilegal, una reunión entre miembros de la Unidad de Asuntos Internos de la Policía Nacional y de agentes del Centro Nacional de Inteligencia (CNI), de acuerdo con un informe policial que fue remitido al Juzgado número 2 de Madrid y al que ha tenido acceso LÚH!. La Policía también ha documentado más de veinte comunicaciones entre Villarejo y el directivo de Antena 3 y La Sexta en esas fechas.
La implicación de Casals en este caso fue más allá, ya que, como recoge ese mismo documento, respondió al mensaje de Villarejo inmediatamente después. La grabación, obtenida y difundida de forma ilegal, fue “alterada” y “distribuida manipulada y con cortes off / on” en varios medios, de acuerdo con los peritos de la Policía Nacional y del Centro Criptológico Nacional. El objetivo de su difusión, de acuerdo con los agentes, habría sido desacreditar la investigación contra el pequeño Nicolás, que afectaba también a un socio de Villarejo.
La Policía, asimismo, ha documentado en sus informes cómo periodistas como el director de Ok Diario, Eduardo Inda; el subdirector de El Mundo, Esteban Urreiztieta; o Sandra Fernández, actual directora de comunicación del Gobierno de Isabel Díaz Ayuso en la Comunidad de Madrid, contribuyeron a dar mayor repercusión a esta grabación ilegal. El propio Villarejo también la difundió a través del medio Información Sensible, fundado por su mujer y por el periodista Daniel Montero, pero que en realidad controlaba el excomisario.
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